PREVENCIÓN DE CONSUMO DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS EN LAS
INSTITUCIONES EDUCATIVAS
Se
ha sostenido repetidamente que la escuela es la institución clave para la
realización de programas de promoción de la salud, fomentar los factores de
protección y reducir los factores de riesgo, teniendo en cuenta que los
comportamientos que se instauran en la infancia y en la adolescencia tienen
una gran probabilidad de mantenerse en la edad adulta y que el
involucramiento de más jóvenes en actividades de promoción de la salud puede
reducir notablemente el riesgo de enfermedades prevenibles y otras
consecuencias negativas para el desarrollo personal de los jóvenes, y
consiguientemente incrementar el estado de salud de la población.
La
Educación para la Salud se entiende como un proceso de información, de
involucración del individuo, a fin de que adquiera hábitos, actitudes y
conocimientos básicos para la defensa y promoción de la salud individual y
colectiva. Es un intento de responsabilizar al alumnado, preparándolo para que,
poco a poco, adopte un estilo de vida lo más sano y equilibrado posible y
unas conductas positivas de salud.
Alejarse
del riesgo del consumo de drogas no sobreviene a partir de resaltar sus
peligros, sino de ofrecer otras alternativas más deseables y motivantes, que
impliquen proyectos de vida y satisfacciones más gratificantes que la
experiencia con las drogas.
En
otras palabras la educación sobre las drogas debe ayudar a los individuos a
tomar conciencia del problema en toda su complejidad, así como el
fortalecimiento de las características propias del sujeto y de su interacción
con los otros y con el entorno que le permitan llegar así a una decisión libre
de un posible consumo dentro de la actual cultura de drogas.
Debemos
de otro lado reconocer que la educación es solamente otro de los medios para
prevenir el abuso de drogas, ya que no se puede desconocer la importancia de
otros elementos relacionados con aspectos de carácter biológico, social,
cultural económico y relacionados con la oferta, todos ellos importantes dentro
del fenómeno complejo de la drogadicción
Un
elemento que deben tener en cuenta los programas educativos es la amplia gama y
diversidad de estudiantes a los cuales se dirigen, entre los cuales puede
contar con sujetos que han experimentado con sustancias, algunos que son
usadores o abusadores, algunos compulsivos, otros que posiblemente han
abandonado el consumo y otros que posiblemente nunca han tenido acercamientos a
ninguna sustancia
Pero de
otro lado, debe contemplar también los modos de relación que se viven al
interior de la institución y entre alumnos – escuela – familias – contexto y
los elementos al interior de cada uno de estos grupos que pueden actuar como
elementos facilitadores o protectores ante el consumo.
Podría
entonces, y desde los elementos anteriores, plantearse las acciones preventivas
en la escuela, desde los siguientes frentes:
·
Las
relaciones interpersonales
·
El
desarrollo personal.
·
El
entorno.
·
La
utilización del ocio y tiempo libre.
·
El
acompañamiento y formación a los padres.
El pasado miércoles 9
de mayo el intendente William Fonseca les realizo una charla a los estudiantes
de grado noveno y 1001 que duro cerca de
dos horas con cada grupo sobre el tema de las Drogas siendo muy satisfactorio
contar con su ayuda en la prevención de esta problematica.